Trazando la armonía
Si todos reconocen lo bello como
tal,
Reconocen a la vez lo feo.
Si como tal reconocen lo bueno,
reconocen a la vez lo que no es
bueno.
Porque Ser y No-Ser se generan
mutuamente.
Difícil y fácil se complementan
entre sí.
Largo y corto se moldean
mutuamente.
Entre sí se invierten alto y
hondo.
Sonido y tono mutuamente se enlazan.
Antes y después se siguen entre
sí.
El sabio obra sin actuar.
Enseña sin hablar.
Todos los seres se presentan ante él,
y a ninguno se niega.
Crea, pero no posee.
Realiza, pero no retiene.
Cuando termina la obra,
no se aferra a ella.
Y precisamente por no aferrarse,
nada ni nadie le abandona.
La dualidad y la sabiduría en el universo
En este mundo, el reconocimiento
de lo bello implica también aceptar lo feo.
Así como al apreciar lo bueno, se
reconoce lo que no lo es.
La dualidad de Ser y No-Ser se
entrelaza creando una armonía inevitable.
Lo difícil y lo fácil no son
opuestos, sino complementarios y se moldean mutuamente.
El contraste de largo y corto se
equilibra en una danza continua.
Alto y hondo se invierten entre
sí, creando una interconexión sorprendente.
El sonido y el tono se enlazan en
una sinfonía perfecta.
El fluir del tiempo se entrelaza,
con el antes y el después conectándose en una secuencia sin fin.
La sabiduría se manifiesta en la
acción sin esfuerzo y la enseñanza sin palabras.
Todos los seres se presentan ante
el sabio, y él acoge a todos sin excepción.
El sabio crea, pero no se apropia
de sus creaciones, realiza sin aferrarse a los resultados.
Al dejar ir sin apego, nada ni
nadie le abandona.
En este paradigma de equilibrio, encuentra la verdadera libertad.
Así, la armonía del universo se
revela en el desapego y la aceptación de la dualidad.
El impacto de esta sabiduría
radica en el reconocimiento de que todas las cosas se complementan y se
entrelazan, generando un todo cohesivo y armónico.
Al aplicar esta visión en la vida,
se encuentra la paz y la plenitud, liberándonos de las cadenas de la necesidad
y el sufrimiento.
“Encuentra la paz en la dualidad del mundo: lo bello acepta lo feo, lo bueno reconoce lo no bueno. Armoniza contrastes, abraza conexiones, libera el apego. Así, hallarás la verdadera libertad y plenitud en la vida.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario